Escasa indemnizacion por amputacion de pierna a paciente debido a error de diagnostico. Responsabilidad profesional
A M. g. F., de 53 años, no se le hizo ninguna prueba hasta una semana después de su primer ingreso en Urgencias
La Conselleria de Sanidad tendrá que hacer frente a una nueva indemnización por los fallos en la atención a una paciente. En concreto, la sección segunda de la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat ha dictado una sentencia en la que ha estimado el recurso interpuesto por una afectada y ha condenado al departamento al pago de la indemnización de 161.993 euros más intereses legales desde la fecha de la reclamación administrativa. El auto desvela que, por un error de diagnóstico, se tuvo que amputar una pierna a la paciente.
El caso arranca la madrugada del pasado 6 de diciembre de 2014. M.G.F., de 53 años de edad, acudió a Urgencias del centro sanitario integrado de Villena con un fuerte dolor repentino en el pie izquierdo, concretamente en la planta del pie, además de frialdad y adormecimiento. El diagnóstico, sin realizarle ninguna prueba, fue de «parestesias inespecíficas», según la demanda tramitada por el abogado Javier Bruna Reverter perteneciente a los servicios jurídicos de la asociación El Defensor del Paciente.
El dolor no cesaba y la sensación de adormecimiento persistía, por lo que la mujer pasaba las noches sin dormir en un sillón, ya que no podía estar acostada en la cama. Ante ello, acudió nuevamente el 8 de diciembre al mismo centro. Esta vez el diagnóstico fue de «fascitis plantar», por lo que se le realizó un vendaje compresivo que tenía que llevar durante seis días.
Dado que el dolor, el adormecimiento y la frialdad persistían y los dedos sufrían hinchazón, el día 11 la paciente acudió, de nuevo, al centro de salud de Villena, con el mismo diagnóstico: fascitis plantar, y se le retiró el vendaje.
Finalmente, la paciente, totalmente desesperada por el dolor, acudió el día 13 de diciembre a Urgencias del Hospital de Elda, donde ingresó con una isquemia subaguda en el pie izquierdo. Después de la realización de las pruebas pertinentes, se la trasladó al Hospital General de Alicante, donde se llegó al extremo de tener que hacerle una amputación ‘infracondilea versus supracondilea‘. Fue dada de alta el 5 de enero de 2015.
La sentencia citada considera que: «Es claro que existió una mala praxis que se concretó en un error en el diagnóstico el día 8 de diciembre, donde ya se advierte un síntoma, temperatura diferente en ambos pies, que orienta a un problema vascular claramente agravado por la aplicación de un vendaje compresivo. Error de diagnóstico que también se mantuvo el 11 de diciembre. La demandante, por ello sufrió la amputación de la extremidad izquierda.«
El Defensor del Paciente quiere destacar que estos hechos ponen de manifiesto la impotencia y la rabia de la paciente y de sus familiares del por qué no se le hizo ninguna prueba hasta el día 13 de diciembre en el Hospital de Elda. Porque si el día 6 de diciembre la hubieran derivado directamente al hospital, la paciente no hubiera perdido la pierna, han asegurado.